Paradójicamente, mientras más se reduce, mayor quisiéramos que fuera en su dimensionalidad territorial. Del rimbombante “gran Gascue” se habla y escribe desde hace otros tiempos. Tanto lo apreciamos que hay quienes han hecho llegar el mito urbano hasta las lindes del malecón.
Originalmente era una hacienda, grande, eso si. Se puede apreciar su magnitud si se revisa la cartografía levantada por Casimiro de Moya para su plano de la ciudad de mayo de 1900. Pertenecía a Francisco Gascue Olaiz, escrito así mismo, con “S”, pero con zeta en el último y extraño apellido. Aparece referido como tal en el libro “El papel moneda dominicano”, tomo I, 1782-1912, de los autores Miguel Estrella e Isaac Rudman. Y lo que allí se dice de ese personaje mueve a reflexion.
Al pie de la pagina 28 (tercera cita), del referido libro, se puede leer, y citamos: “En una auditoria realizada al Contador Real de Santo Domingo, don Francisco Gascue Olaiz, se encontraron algunos fajos de billetes falsos, dando motivos a una investigación en la que se involucro al funcionario real en el acto doloso. Hecho prisionero, fue conducido a Caracas de donde nunca mas regreso ni se supo de el. A Francisco Gascue se le debe el nombre de un importante sector de la ciudad de Santo Domingo. Antiguamente la avenida Bolívar fue conocida como Camino de los Gascue, por conducir desde la zona intramuros a la hacienda donde el residía con su familia”.
Ya en lo adelante, cualquier comentario esta demás…
Originalmente era una hacienda, grande, eso si. Se puede apreciar su magnitud si se revisa la cartografía levantada por Casimiro de Moya para su plano de la ciudad de mayo de 1900. Pertenecía a Francisco Gascue Olaiz, escrito así mismo, con “S”, pero con zeta en el último y extraño apellido. Aparece referido como tal en el libro “El papel moneda dominicano”, tomo I, 1782-1912, de los autores Miguel Estrella e Isaac Rudman. Y lo que allí se dice de ese personaje mueve a reflexion.
Al pie de la pagina 28 (tercera cita), del referido libro, se puede leer, y citamos: “En una auditoria realizada al Contador Real de Santo Domingo, don Francisco Gascue Olaiz, se encontraron algunos fajos de billetes falsos, dando motivos a una investigación en la que se involucro al funcionario real en el acto doloso. Hecho prisionero, fue conducido a Caracas de donde nunca mas regreso ni se supo de el. A Francisco Gascue se le debe el nombre de un importante sector de la ciudad de Santo Domingo. Antiguamente la avenida Bolívar fue conocida como Camino de los Gascue, por conducir desde la zona intramuros a la hacienda donde el residía con su familia”.
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